jueves, 13 de septiembre de 2012

"New Sensation" Capítulo 47-Nuestro destino está escrito. 

-No…No me lo creo-Recogí mis pies, apreté mis zapatillas contra el suelo, Winona estaba muriendo por dentro al recordar-Cuéntame la historia.
-No creo que sea buena idea...-Cogió un cojín y lo abrazó con fuerza mientras perdía la mirada en el techo, sus ojos brillaban y se enrojecían al mismo tiempo, lo que quería decir, que iba a romper a llorar.
-Lo necesitas Wi-Me levanté del suelo y la di un beso, con cuidado de no tocar su herida recién cosida-Cuéntamelo.
Ella secó sus lagrimas, después se levantó dejándome sola sentada en la mullida cama, abrió la puerta del armario que le correspondía, rebuscó un poco por los cajones de abajo, tiró hacia atrás unas cuantas zapatillas con plataforma negra, de esas que tanto le gustan a ella, hasta que encontró lo que buscaba, era un sobre color amarillo apagado bastante currado y arrugado, lo cogía con cuidado por miedo a que acabara en el suelo, se sentó y a continuación lo abrió despegando el celo que lo cerraba, sacó un taco de fotos, las miró y finalmente selecciono dos que puso encima de la cama.
-Mira, este es Jake-Señaló a un chico, el que aparecía junto a ella en la primera foto que posó en la cama, encendía el cigarro que Winona sostenía entre los labios, parecían felices, es mas ella sonreía al mirarle-Era mi novio, creo que los mejores momentos de mi vida, los pasé con él, íbamos a conciertos de rock juntos, me hizo mi primera dilatación en la oreja, el día de mi cumpleaños me llevo a esquilar ovejas, fue extraño y a la vez gracioso-Echó una pequeña carcajada por su boca
-Vaya…-Añadí sin apartar la mirada del melenudo chico.

<3
-Y bueno-Acercó la segunda foto-Esta es Janet, en realidad se llamaba Jennifer, pero odiaba ese nombre, decía que sonaba a gitana, y bueno para hacerla feliz, yo la puse Janet, mi mejor amiga, si, una parte imprescindible de mí, no hacíamos lo típico que hacían las amigas, es más, nuestras costumbres eran rarísimas…Pero nos divertíamos, mucho
<3
-Y… que les pasó, porque estoy segura de que tu no les mataste.
-¡Si que lo hice Dakota! Yo les quiero aquí conmigo ¡Les quiero de nuevo a mi lado!-Empezó a llorar, pobrecita, menudo llanto, la tuve que calmar un poco abrazándola, quería saber, y cuanto antes mejor, que había pasado en su vida, ¡Es solo una niña!, a saber lo que había tenido que pasar, intentaba calmarse como podía, pero seguía temblando, de sus ojos nacían lagrimas con continuidad, pero consiguió contarme, el porqué de su sufrimiento.
-Pasó hace dos años, en Grecia, por si no lo sabías, soy de allí-Me sorprendí un poco, pero seguí escuchando-Tenia una vida perfecta, era hija única, mis padres tenían dos buenos puestos en sus respectivos trabajos y me daban todo lo que pedía, mi novio Jake me trataba como a una reina, con el era feliz, íbamos de concierto en concierto, el tocaba en una banda y yo me estaba aficionando al rock, cuando no estaba con él, estaba con Janet, era raro el día que no se quedaba una a dormir a casa de la otra, te puedes imaginar que vida, mis notas, buenísimas, no sabía que era la mala suerte, lo único malo era que, Janet y Jake estuvieron saliendo de pequeños, pero ellos me decían que estaba completamente superado, en mi quinceavo cumpleaños monté una súper fiesta en mi casa, haber, nada en comparación con las que hace Eric, pero si muy buena, me compré un vestido rojo precioso, con brillante incrustado entre los hilos y unos tacones negros de aguja, todo el instituto estaba allí, me adoraban, después de soplar las velas de la inmensa tarta unos de mis mejores amigos sacó el alcohol, todos se desmadraron un montón, menos yo claro, de repente me entraron ganas de ir al servicio y acudí a él, en el pasillo me encontré a Jake y Janet besándose, me puse a llorar, me sentía peor que la mierda, algo sin valor, ellos se percataron de mi presencia y salieron detrás de mí, yo les eche, les eche sin piedad de la casa, aún sabiendo que Jacob tenía que coger el coche y estaba muy borracho, sabía que era peligroso, y aún así los eche, no quería verles cerca de mi, quería que desaparecieran de mi vida para siempre, así que se marcharon sin mirar atrás, y me acuerdo muy bien de las malditas palabras que dije “Ojala y se mueran” …Al día siguiente vi la noticia en el periódico mientras desayunaba “Dos adolescentes mueren en un accidente” Al principio no le di mucha importancia, vamos, en la vida pasan cosas así a diario, hasta que pude leer lo que ponía dos renglones más abajo, “Jake Bubier y Jennifer Ramirez, dos adolescentes de 18 y 15 años estrellan su coche y caen por un barranco terminando así sus prematuras vidas en el acto” Se me calló el alma al suelo en esos momentos, mi madre me agarraba porque en cualquier instante me iba a desvanecer, Jake y Janet, habían muerto ¡Por mi culpa, Dakota! ¡¡Por mi culpa!!-Lloraba a gritos, yo la agarré fuerte, la acaricié despacio para que mi tranquilidad pudiera llegar a ella y se calmara un poco.
-Winona, son cosas que pasan en la vida, nuestro destino está escrito, sino hubieran muerto ese día, lo habrían hecho al día siguiente, tú no tienes nada que ver con su muerte, me escuchas-Agarré su carita, roja como un tomate-¡Nada!
-Yo no tenía que haber dicho eso, Dakota, ¿Por qué les eché? ¿Por qué dije eso? ¡Soy una mala persona joder!-Me abrazó, y posó su cabecita en mi hombro, yo hice lo mismo, y sentí me empapaba poco a poco con sus desgarradoras lagrimas.
-¡No seas tonta! Quizá todo ha salido demasiado mal, pero no es tu culpa me cago en la puta, nadie, ni siquiera la pitonisa cutre de la feria, puede adivinar el futuro, y lo que está más que claro que el agua, es que no ha sido tu culpa, para nada, lo que no entiendo, es ¿Por qué estás aquí?
-Robé un televisor para venir aquí, quería largarme de mi hogar para no recordar nada…-Todo quedó en silencio-Tan solo quería despedirme de las personas que han llenado mi vida de felicidad durante años…-Cogió un trozo de papel higiénico y secó sus lagrimas, yo le di una toallita desmaquilladora para limpiar el rímel que se había corrido en su carita.
Pasaron unos quince minutos en los que ninguna de las dos hablamos, Wi se tranquilizó un poco y guardo las fotos de nuevo en el sobre, yo se lo arrebaté de las manos, lo guarde en mi armario, bajo llave, volví a su lado y la di un beso en la mejilla.
-Deja los recuerdos atrás, aquí estoy yo, y de lo que puedes estar segura, es de que siempre lo estaré-Sonrió, colocó un mechón de su abundante pelo detrás de su perforadisima oreja, después me miró y me dio la mano.
-Gracias-Me dijo, puse morritos de choni tonta y empezó a reírse-Eres la mejor, pero si te he contado esto, es porque no quiero que pierdas ni a Karen, ni a Eric.
-Winona, tengo que odiar a la persona con la que he compartido los 16 años de mi vida, desde que nacimos llevamos juntas, y tengo que dejar de querer a lo más bonito y a la vez odioso que me ha pasado en la puta vida ¿Crees que es fácil para mí?-Levanté la mano, ya que era algo obvio.
-No tienes porque apartarles de tu vida, o por lo menos no dejar a tu mejor amiga por un buenorro.
-Eric no es un buenorro, es mucho más.
-Esta potente, es un chulo, esta todo el día ligando, por favor Dakota.
-Así es, has descrito a la perfección a la persona que sostiene mi mundo-Ella me miró, me até un cordón de la zapatilla para evadirme.
-Antes de todo, tengo que hablar con Eric, más bien discutir con él, aunque a mí me da igual que se lie con Karen…
-Vale Dakota, cuéntale eso a quien se lo crea, a mi no maja-Me dio una colleja leve, yo la tiré contra el suelo.
-Bueno, vamos, levanta, acompáñame a casa de Eric, se va a cagar este

No hay comentarios:

Publicar un comentario