"New Sensation" Capítulo 25-Mientes

-Winona… Ese chico, me intentó…Bueno me obligó a ya sabes…Y Eric le dio un puñetazo en la nariz para que me dejara en p…
-¿¡Que Eric hizo qué?! ¿¡Eric Surita se ha pegado por ti?!¡Dios mío Dakota!-Le tapé la boca con la mano porqué Kristin había fijado la mirada en nuestro balcón, estuvimos un instantes petrificadas, sin movernos, hasta que ella volvió a mirar a Damián.
-¿Estas tonta?-Susurré
-No tía, que Eric le ha partido la nariz por ti, es un héroe.
-No sé ni para que lo pregunto, eres tonta, ya es una afirmación ¿un héroe? Sí, y yo soy rubia…-Me levanté despacio y arrastré a Winona conmigo hacía dentro de la habitación, cerré las puertas y me senté en la cama, cruzando las piernas como los indios, ella me miraba desde el suelo, donde la había dejado yo, me empezó a sonreír con picardía, yo le devolví la sonrisa, con un poco de malicia, solo con eso nos entendimos.
-Vamos a bajar-Dijimos a la vez, nos reímos rápidamente, pero nos mandamos callar mutuamente al abrir la puerta, cerramos delicadamente, ningún ruido podía sonar, sino nos obligarían a bajar a cenar, y no teníamos hambre, bueno, por lo menos yo no, porque el estomago de Winona rugía como las fieras.
-Winona coño, no me tires del puto pelo-le di en la mano, en la cual tenia enganchado un negro mechón de mi pelo.
-Es que tengo hambre-Puso cara de bebe llorón, y se acariciaba el estomago en círculos.
-Luego te doy un kínder bueno, pero date prisa, vamos Wi.
Salimos descalzas por la parte de atrás del jardín, íbamos con precaución para no pincharnos con nada, ya escuchábamos la voz de Kristin, así que nos sentamos detrás de un arbusto y ajustamos las orejas.
-Esto no se va a quedar así-Se oyó el sonido de un mechero, quemando un cigarrillo, era Damián el que hablaba.
-Claro que no churri, claro que no, yo traigo a mis amigos el barrio del Porto du ast, que esos saben pegar
-No quiero que te metas en mas movidas por mí, yo le pego solo, no quiero que me llame cobarde, además, es un niñato pijo de mierda, yo puedo con él.
-Si amor, pero te recuerdo que te rompió la nariz
Di un leve codazo a Winona, nos miramos sorprendidas, hablaban de Eric, ella estaba preocupada, y yo, aunque no lo creáis (que si lo creéis) también. Seguimos escuchando.
-Creó que se cómo llegar hasta él sin que vaya con los guardas, déjamelo a mí churri-Que puta pesada con churri, que asco de niña.
-Vale, me voy, ven aquí.-Miré un poco y vi que se estaban besando, así que volvimos a nuestro cuarto, no me podía creer, que fueran a pegar a Eric…

Era por la mañana, después del silencioso y aburrido desayuno entramos a la clase de lengua, la profesora apuntaba las faltas en el parte, mientras Winona y yo, obviamente, nos pusimos a hablar.
-Tía, no quiero que peguen a Eric, pobrecito, ¡tenemos que impedirlo Dakota!
-No lo impediremos, se lo merece-Dije seriamente, mientras subrayaba de verde el tema de hoy.
-¿Pero cómo eres tan mala? Que es Eri…-La profesora aporreó la pizarra.
-Calar-vos! ,Dakota, vous, leia a redação da pessoa à que mas odeia-La profesora me ordenó que leyera mi redacción sobre la persona que mas odiaba, Kristin me miraba con desprecio, yo me levanté, alise mi falda y me coloqué delante de la pizarra.
Empecé a leer.
-Creo que esto será difícil de comprender, pero es lo que siento, mas difícil es de expresar, pero ya no puedo seguir tragando todo lo que soy incapaz de aguantar.
Es él, perfecto por fuera, parece estar hecho del cristal más fino que Swarovsky nunca allá podido crear, sus facciones están claramente esculpidas por los más delicados ángeles celestiales, debe su voz a la más bella novena sinfonía de Beethoven, si algo más bonito llega a tus oídos debes saber que en el cielo ya yaces, las más finas texturas se inspiraron en el tacto de sus manos, la belleza será algo abstracto, hasta que tus ojos puedan gozar de placer, al verle sonreír, el cielo no es su límite, porque sabe que en la luna ya hay pisadas, salta por y con sus sueños y está comprobado que si algo se complica, su sonrisa te apacigua.
Ahora, es frio como el más grande de los ice-berg, la maldad recorre su cuerpo, en el mundo solo existe una persona, él, nada le puede superar, se encuentra genial haciéndote sentir mal, de su perfecta boca salen las palabras más horribles que por tu cabeza pueden pasar, solo algo bueno puedes en el encontrar, la belleza exterior, porque su interior no tiene valor, ahí se da a demostrar, que no es bonito todo lo que aparenta formalidad, solo son dichos estúpidos, desengáñate.
No, no es oro todo lo que reluce.
Levanté la vista del cuaderno, vi a todas las chicas de clase con la boca abierta, Winona me miraba mal, ya que sabía de quien estaba hablando, de repente vi que Lia empezó a dar palmadas lentamente, las demás chicas la siguieron, un enorme aplauso me acogió con gusto, la profesora se unió a él, las únicas que no lo hacían era Winona y Kristin, sonreí y volví a mi sitio.

-Joder Dakota, ¿Por qué le odias tanto?
-Porque sí, no seas pesada Winona macho.
-Si se diera la posibilidad de que Eric y yo saliéramos juntos, ¿te molestaría?-Pegué un mordisco al regaliz, estiré para arrancar un trozo.
-No…Claro que no…Pero nunca vas a estar con él, no te flipes-Wi clavó sus ojos verdes en mi rostro, yo levanté los hombros en señal de interrogación, ella apartó la mirada y se comió el ultimo trozo de su regaliz, me di cuenta de que hoy se puso las lentillas azules.
-Sí que te molestaría
-Si vas a contestar por mi ¿Por qué coño me preguntas?, que suplicio de niña…

Seguimos caminando por el pasillo, ya nos tocaba matemáticas, se paró en seco delante de mí, Kristin, con esa horrible cara redonda y ese lunar enorme negro, puaj, me recordaba a la bruja del cuento de Hansel y Gretel…
-Quita-Dije, Me sonrió malignamente, pero no se movió.
-Tú me vas a hacer un favor, niñata-Me empecé a reír con falsedad.
-¿A ti? Cariño, estoy totalmente sobria, es decir, que ni borracha te haría a ti un favor, venga, quita .-Kristin me empujó fuertemente, Winona se la encaró, pero una de sus amigas la calló la boca con la mano, yo estaba furiosa, pero no podía darla, tenía 3 años más que yo, me podía reventar fácilmente.
-Tú, puta de mierda, me vas a llevar con Eric Surita, a mí, y a mi novio, vas a quedar con él en un sitio, sin guardas, y ahí es cuando le van a reventar la cara¿Ok?
-Yo no conozco a Eri…
-Mientes-Kristin me mostró la nueva entrega de la revista “Capricho”, saldría en una semana a la venta, no sé como la tenía ya Kristin, pero eso no es lo importante.
En la portada se veía a Eric, que me llevaba en brazos, era a la salida de Brasil Diamont, pero lo peor era el puto titulo de la exclusiva…
“Eric Surita saca a una borracha de la salvaje Brasil Diamont”.
Que hijo de la grandísima puta.