Capítulo 7- ¿Eres Dudu Surita?

Era una casa, ¡pero qué digo!, era una mansión que flipas, sus doradas puertas estaban ligeramente abiertas, en la parte superior había dos letras de oro blanco, ponía FS.
Después de atarme un cordón de la van, me levante, di dos pasos y asome mi cabecilla por la puerta, vi algo increíble, había una mesa llena de bollitos, glaseados, de chocolate, rellenos de vainilla, de turrón, con siropes de caramelo, fresa, menta, platano, al lado, en una plateada bandeja, batidos de diversos sabores, todos decorados con coloridas pajitas y frutas clavadas en el borde del vaso, tenia muchísima hambre, no se oía un alma y había tanta comida que ni se darían cuenta de si faltaba un pequeño bollito, entre sin abrir mas de lo que estaba abierta la puerta, caminé despacio por el inmenso jardín(Y cuando digo inmenso, es INMENSO) y me acerqué a la mesa, y ¡claro! Yo siempre en mi salsa, soy súper indecisa, así que me metí un dedo en la boca y empecé a mirar todos los bollitos confusa, cuando de repente.
-¿Que estas fazendo?.
Eso es lo que él me dijo. Un chico de estatura media, con preciosas melenas color pardo, alborotadas pero al mismo tiempo bien peinadas, pequeños ojos, pero alegres al mismo tiempo, una nariz chatita y básicamente perfecta, tendría unos 15 años aproximadamente, parecía un ángel caído del cielo, su aro de la nariz le hacía más guapo y original, sus preciosos ojos me miraban esperando una respuesta, era guapillo, pero no era mi tipo, me parecía muy niño.
-Lo siento ,no te he entendido-Ya que me estaba hablando en Brasileño, y sí, todavía no podía creerme que ese chico pudiera ser tan guapo, tenía una chispa, algo que no se suele encontrar en los hombres, es mas , juzgar vosotras mismas:

 El chico se me quedo mirando extrañado, yo me subí el pantalón y le mire con cara de no entender nada, al principio creía que era porque le había hablado Español, pero me di cuenta de que no…
-¿Por qué no chillas?
-Tampoco eres tan feo…-El muchacho se puso a reír a carcajadas, vale, creo que ya me había terminado de encantar, ¡Pero como una persona humana puede tener esa sonrisa, es hermosa, muy hermosa! Pero repito, no me gusta, para nada, a mi me los dais mas maduritos.
-No lo decía por eso ¿No sabes quién soy?-El chico me miro mientras ponía una mano sobre la mesa, movía los dedos rápidamente, estaba ansioso por saber mi respuesta, que yo le iba a dar con gusto, aunque no le sentara guay.
-Pues siento decirte que no.- El muchacho levanto una ceja, puso cara de sorpresa, ¿Pero quién será este tío? Ok, aquí tenéis la respuesta…
-Soy Dudu Surita ¿Seguro que no eres una fan loca?
Dudu Surita, ¿El que le gusta a Karen? No me lo puedo creer, me he ido a meter en la casa de la mismísimo Dudu Surita (no me extraña que a Karen le gustase, porque el niño está para hacerle de todo menos pis encima) toma ya, soy una fiera, es Dudu Surita, no tengo ni puta idea de que hace, pero le gusta a Karen. Volví a mí ser y respondí a Dudu.
-No soy una fan loca, no sé ni quién eres…¿Y como es que sabes español?
-¡Ves! Quieres saber más cosas sobre mí,¡eso es que eres una fan!-Dudu se echo hacia atrás y abrió mucho los ojos, yo los cerré  en señal de indiferencia.
-Di lo que quieras, yo me piro , siento haberte molestado “super star”-me dirigí hacia la puerta algo molesta, pero una mano me cogió del brazo.
-Lo siento, es que estoy pasándolo un poco mal, coge los bollitos que quieras, no te preocupes…
Dudu se dirigió hacia una hamaca, se sentó y apoyo su dulce cabeza sobre la mano, no sé porque, pero tenía la necesidad de ayudarle, me acerque y me senté a su lado, en el césped.
-Cuéntame lo que te pasa, se que nos acabamos de conocer, y que tu eres imbécil y crees que soy tu fan, pero creo que quiero ayudarte Dudu.-Otra vez esbozo una sincera sonrisa, sacó una guitarra y me la dio.
-Esta, esta es mi frustración-Empecé a observar la guitarra, no le pasaba nada, Dudu me vio dándole vueltas a dicho instrumento y se puso a reír de nuevo.
-No es eso, es que no me sale, soy una cantante Brasileño , millones de chicas se mueren por mis huesos.
-Tampoco te flipes-Dudu me miro mal, y prosiguió.
-Es la verdad!, Siempre canto canciones de otros artistas, y yo quiero algo mío, quiero dejar de ser el típico imitador.
-Yo te puedo ayudar, la guitarra no la se tocar, pero cantar...Bueno, cantar tampoco, pero se me da muy bien escribir asi qué, chavalín has dado con la persona indicada.
Nos pusimos a componer, en la letra de nuestra canción aparecía mucho la palabra amor y alguna que otra palabrota por mi parte, Dudu se reía mucho conmigo, por mis múltiples tonterías y gilipolleces, de repente en el balcón más alto de la casa apareció un chico, parecía otro Dudu pero no veía bien, parecía que estaba bueno, pero no lograba visualizarle del todo, el chico nos advirtió (más bien nos mandó callar)
- Calar-vos!-Se volvió a meter dentro.
-A dicho que nos callem…
-Ya losé, lo he entendido, y ¿quién es <<semejante borde de mierda creído y subidito de tono>> ese?
Dudu iba a abrir la boca cuando oí una voz que me llamaba “Dakota! Dakota! Estas hay?, traigo los helados!” me levanté rápidamente, me sacudí la hierba y empecé a andar, Dudu se levanto y me siguió hasta la puerta.
-Adiós… Eeem cómo te llamas? –Volví los ojos y suspire, luego sonreí y respondí a Dudu (a todo esto, Winona estaba detrás mía, con la boca mas abierta que una cueva y los ojos como platos, como no, mirando a Dudu”
-Dakota, encantada-El sonrió levemente y se apoyo en la puerta sensualmente (Winona soltó un helado y se acerco mas al el, esta tia se estaba poniendo muy cachonda)
¿Puedes volver mañana Dakota? parece que esto va muy bien gracias a ti-Yo asentí, no me hacía ilusión estar con un famoso, sino con Dudu, una persona genial, asentí, y me di vuelta tirandome levemente del pelo para alisarlo.
Nos fuimos y sabía que Winona me iba a taladrar a preguntas, pero yo antes le hice una a ella:
-Cuéntame todo lo que sepas sobre Dudu Surita, y también sobre el chico que vive con él.